lunes, 12 de mayo de 2014

Hacer maletas

Este viaje comienza conmigo frente a un ordenador demorándome un poco antes de dar el definitivo clic. Clic. Ya está. A partir de ahora, y por los próximos doce meses, esta maleta que acabo de cerrar estará siempre abierta al lado de mi cama, como un recordatorio de estar siempre de viaje, de paso, en camino hacia algún lugar.

Estabilidad.

Confort.

Dos conceptos por abandonar. Como esta casa, como aquel empleo. Como los amigos que ayer se despidieron en una gran fiesta con DJ y confetti. "¿Por qué dejarlo todo, así por así?", me preguntaron mientras sacaba cerveza de la refri. Me quedé helado. No lo sé. "O sea, no entiendo. ¿Para qué?" No lo sé. "¿Y hacia dónde?". Ni idea. Algún lugar encontraré.




No hay comentarios:

Publicar un comentario